Despacito pero sin pausa. Así es como están instalándose las marcas de belleza sostenibles en el mercado beauty internacional. No sólo queremos saber la procedencia de  la ropa que nos ponemos y los ingredientes de los productos que compramos, sino también cómo están formulados sérums, cremas, tónicos y limpiadoras con las que nos cuidamos la piel. Este boom viene tanto por la industria como, por nosotras, las consumidoras. Por un lado, la industria cosmética sabe que el camino a seguir y a partir de aquí empieza a esbozar nuevas fórmulas, formatos y alternativas. Por otro lado, nosotras, demandando  cada vez más información y transparencia. 

Que los ingredientes hayan sido cultivados y recolectados de manera respetuosa con el medio ambiente, que la formulación sea, principalmente, biodegradable y no contenga microplásticos o nanopartículas dañinas para la salud del planeta son, a grandes rasgos, los retos a los que se enfrenta el universo de la cosmética hoy en día. Ante estos nuevos retos, triunfa la tendencia que aboga por rutinas de belleza minimalistas, formuladas a base de  ingredientes naturales y cuyo packaging está fabricado a partir de materiales reciclados.  

Si estás pensando en adentrarte en una rutina de belleza más sostenible, estas son algunas de las marcas que tienen que formar parte de tu cuidado. Todas disponibles, de manera “phygital”, aquí, en WOW. 

Nuria Val y Gabriela Salord son las fundadoras de ROWSE, una de las firmas españolas pioneras en defender los beneficios de una rutina de cuidado facial en tan solo tres pasos, basados en sus productos. Su filosofía se inspira en el concepto raw beauty, en esas mascarillas caseras que hacíamos en casa a base de yogur y miel –o de aguacate si era  para el pelo– y en productos sencillos y efectivos con los que disfrutar cada día de los ingredientes que provienen de la tierra.  

ROWSE vio la luz en 2018 con una única referencia, el Winter Body Oil, un aceite corporal de invierno cuyos ingredientes principales son la rhodiola (nativa de las regiones árticas), la borraja, la almendra y el pino de Siberia. Dos años después, la firma que nació con la misión de conectar a las personas con el planeta, cuenta en su catálogo con aguas naturales que funcionan como tónicos y que recolectan lo mejor de nuestra agricultura orgánica, aceites de cáñamo, jojoba o aguacate prensados en frío y champús sólidos libres de crueldad animal, entre otros. El veganismo es precisamente una de las bases sobre la  que se formulan sus cosméticos, pero también una economía circular que priorice el uso de  materiales existentes y reciclados en sus envases de vidrio y en el etiquetado de cada uno de sus artículos.

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Menos es más. 

Pocos productos pero versátiles, saludables y genderless. midnight 00.00 nació por la necesidad de simplificar el caos que, para determinados perfiles, suele significar comprar  cosméticos: demasiadas opciones disponibles y promesas excesivas. Con este punto de partida, Nina Uc dio forma a midnight 00.00. Cofundadora y directora creativa, Nina tiene muy claro que buscaba unos productos que permitieran una rutina fácil, rápida y decidida. Todos sus productos, diseñados, testados y hechos con pequeños productores locales en España, contienen más de un 90% de ingredientes naturales de alta calidad, y ninguno contiene ingredientes derivados de animales. Trabajan con ingredientes no irritantes y de  moléculas pequeñas con niveles de pH óptimos que la piel puede absorber, entender y usar fácilmente. Unos productos, para la cara, el cabello y el cuerpo, pensados para realzar la belleza natural y sincera. En formato sólido y líquido, de manera individual o en pack para quien tiene quiere llevar a cabo la rutina completa. Rutinas efectivas y minimalistas, ideales, como reza su nombre, para la medianoche, cuando al final llega ese momento de tranquilidad para dejarnos llevar y sumergirnos en un momento para nosotras.