El concepto de la contradicción logra cobrar mucho sentido en nuestro día a día , muchas veces definiendo nuestra propia manera de relacionarnos entre nosotrxs y nuestro mundo material. Este dichoso ‘conflicto de significados’ puede llegar a malinterpretarse como un error inaceptable más que una realidad. Muchos hablan de la importancia del balance, el yin y del yang. Desde luego que son formas de describir una polaridad que nos ayuda a separar ‘una cosa’ de ‘la otra’. 

El diseño nos ayuda a experimentar con la idea de que una colisión frontal entre dos elementos dispares a veces puede sentar bien. Hay un caso particular que destaca sobre los demás, teniendo en cuenta que las mismas contradicciones que le dieron vida también lo han convertido en símbolo. El ejemplar es el ‘Lounge Chair y Ottoman’, una butaca tan cómoda que casi resulta incómodo el hecho de tener que levantarse de ella. Este mueble diseñado por los Eames y producido por Vitra es actualmente considerado como una de las referencias fetiche para aquellxs que empiezan a estudiar una carrera de diseño, describiendo el mueble como algo cómodo a la par que original. Desde su lanzamiento en 1956, la imagen de este diseño se ha fraguado en nuestras retinas a base de spots publicitarios, películas y series. Aún así, un 99 por ciento de personas que han visto esta silla no han llegado a sentarse en ella. Entonces, ¿cómo podemos calificarla como original o exitosa de forma generalizada? 

En la década de los cincuenta (época en la que se produjo esta butaca) Estados Unidos estaba viviendo una época de auge en el que el diseño moderno buscaba anular la cultura material de los siglos anteriores e introducir una metodología y lenguaje visual totalmente nuevo. Dentro de este movimiento se encuentran los Eames, una pareja de diseñadores que integran de forma colectiva los talentos de un arquitecto y una artista. Estos dos decidieron combinar sus años de experimentación con el contrachapado curvado junto con la inspiración de un ‘club chair’ inglés. Solo con verla se vé que es cómoda. He aquí donde la nostalgia lleva a los Eames a crear un mueble de época que integra elementos de calidez, comodidad e industrialización. En cierto modo, este diseño incumple las reglas del mueble moderno de tal manera que incluso llega a trascender cualquier tipo de categorización estilística. 

La mera originalidad de este mueble nos demuestra que muchas veces se puede crear sin una línea recta trazada. Al revés, a veces los diseños más atemporales son aquellos que son frutos de diversos choques y errores en el camino.

Imágenes: Charles Eames during a photoshoot for Plastic Side Chairs and Dinette Table, 1954. © Eames Office, LLC, 2017; Charles & Ray Eames. © Eames Office, LLC, 2017; Verner Panton developing the Panton Chair, © Vitra Design Museum. Jay Osgerby with a sketch of the Pacific Chair; © Vitra, photo: Florian Böhm; Ronan & Erwan Bouroullec and Belleville Chair, © Vitra. Konstantin Grcic on a prototype of the Stool-Tool. © Vitra, photo: Florian Böhm. Hella Jongerius working on the Vitra Colour & Material Library, © Studio Likeness.